Hernán Quiróz Plaza
La fase de grupos de la Copa América 2024 llegó a su fin con un agradable sabor a “Vinotinto”. Y es que la selección de Venezuela fue la mayor sorpresa en la eliminatoria inicial, en la que Argentina y Uruguay mantuvieron su condición de favoritos, Colombia ilusionó a su hinchada y México sumó un fracaso más. El campeonato más antiguo del mundo ahora continúa con los cuartos de final. Los de la tierra natal de Bolívar, se alzaron con tres victorias: venció a Ecuador (2-1), México (1-0) y Jamaica (3-0) para clasificarse, lo cual confirma el gran momento de los jugadores venezolanos. Una historia muy diferente a lo que ha sido la participación de la Vinotinto en la Copa América. De 1967 a 2007 solo había ganado un partido. Y en los últimos 15 campeonatos, solo ha superado la fase de grupos en cuatro ocasiones, llegando a las semifinales en 2011.
Salomón Rondón es el gran referente del equipo. Con dos anotaciones más, aumentó su marca como máximo goleador (43 goles) de la historia de la Vinotinto. Su sólida defensa solo permitió un gol. Ambos factores confirman al equipo como favorito para vencer a Canadá en los cuartos de final. Venezuela en la actualidad no tiene las condiciones de país que todos sus vecinos sudamericanos, pero evoluciona en fútbol porque hay búsqueda, reclutamiento y formación de jóvenes. Está trabajando con una lista de 350 jugadores con edad de Sub-17 y Sub-20 formados fuera del país. Muchos hijos de inmigrantes. Son las camadas que vendrán en tres o cuatro años. Lo mismo acontece con Ecuador, comenzó a escalar en el continente, a conseguir triunfos y ya ha participado en cuatro Mundiales porque alumbra jugadores. Buenos, muy buenos. Mejoró el biotipo, la técnica y, sobre todo, la mentalidad. No hay secretos en esto.
La Copa es buena con los que trabajan y cruel con los que improvisan. Como en todos los órdenes de la vida. Es lo que deja la fase de grupos. Después entran a correr las excusas. Bolivia, Perú, Paraguay y Chile llevan tiempo en sus desventuras futbolísticas. No hubo sorpresa ninguna: eran los cuatro que se podían regresar en fase de grupos. Son los cuatro últimos de la Eliminatoria. Y se volvieron. A falta del partido entre Paraguay y Costa Rica, entre los cuatro disputaron once partidos, no ganaron ninguno y marcaron en total 3 goles. ¿Hay algún calificativo peor que pavoroso…?
FENÓMENO
Con suplentes, porque tenía ganado el grupo y prefirió dar descanso a los habituales, sin Messi, igual Argentina convocó a 64.972 espectadores en Miami. Lleva 216.642 entradas vendidas en tres partidos. Juegue donde juegue, es la selección más convocante del mundo.
LA COLOMBIA DE LORENZO
Una de las más atinadas decisiones de Néstor Lorenzo fue creer en James cuando pocos confiaban (se autoincluye este comunicador). Y, sobre, todo, no asignarle funciones específicas en el campo, dejarlo libre, para que sea el comodín, el punto de descarga para el extremo, los interiores, los volantes de contención. Sin lugar ni tarea fijas, simplemente recibir, triangular y lanzar. Sin que tenga que correr a nadie, para que utilice toda su combustible en crear. No es “uno de los mejores” sino el mejor centrador del mundo, por encima de Messi, de Alexander Arnold, de Modric, de Kroos. Cada centro suyo es medio gol. Él no levanta el envío al área para ver si alguien acierta, lo manda intencionado, teledirigido, doblando hacia afuera para que el cabeceador se encuentre con el balón ya orientado y casi de frente. Eso, desde la izquierda. Desde la derecha va combado contra el arco para que un simple roce o desvío lo mande adentro, como en el gol de Lerma a Paraguay. Hacerle dos goles de cabeza a Paraguay es como venderle juguetes a la China. Se los hizo por él.
PULGARCITO
Uruguay cabe 52 veces en el territorio de Estados Unidos y tiene 97 veces menos población, pero en fútbol las dimensiones no cuentan. La Celeste tiene una historia, una tradición, una sabiduría para la pelota que EE.UU no posee. Y lo eliminó en su propia casa, con su gente. Sin embargo, bajaron un poco las acciones de Uruguay, no fue la apisonadora que goleó a Bolivia ni se impuso con la misma amplitud que ante Panamá. Con un añadido: el gol uruguayo que determinó el 1-0 fue muy discutido por offside del autor Mathías Olivera. Estados Unidos protestó furiosamente el fallo del VAR. Hay mucha frustración. “No quiero hablar demasiado del árbitro. Es frustrante, pero así es este torneo”, protestó Christian Pulisic, el 10 del Milan. A su vez, Gregg Berhalter, el técnico estadounidense, se mostró abatido por perder el juego de esa manera: “Es bastante loco. No lo entiendo. Siento que conozco las reglas bastante bien. Tenemos las imágenes que muestran cómo se podría interpretar como un gol en fuera de juego. Es decepcionante. Pero esto pasa en el fútbol y tenemos que vivir con ello”.
GUARANIES A LA BAJA
La última intervención de Paraguay en un Mundial fue en 2010. Luego de aquello devino una debacle futbolística total. En selecciones y clubes. Ahora le han surgido algunos delanteros importantes como Julio Enciso, Micky Almirón, Ramón Sosa, no obstante, sigue pagando los años de no haber trabajado y descubierto figuras.
CUENTO DE CAMINO
El que aseguraba que México nunca iba a quedar afuera en primera fase “porque no les conviene a los organizadores, dado que llena los estadios”, quedó desmontado. Y fue derribado en un partido en el que hubo cinco situaciones de posible penal. Tres manos en el área de defensas ecuatorianos (Hincapié, Félix Torres y Alan Franco) y dos posibles faltas del mismo Félix Torres. El VAR las desestimó. Lo mismo pasó con Estados Unidos, que por ser local clasificaría seguro. Los dos se fueron en primera ronda. Lo mismo aconteció con Argentina en Catar. Le anularon tres goles por una uña y perdió en su debut frente a Arabia Saudita. Y era la selección que colmaba los estadios. Las cosas suelen ser más simples.
INALCANZABLE
El de Bolivia, dicho por su entrenador Antonio Zago y por muchos jugadores, más que ganar era competir, es decir, jugar de igual a igual, aun perdiendo. No lo consiguió. Cayó sin estar a la altura de sus rivales, sin chance alguna de victoria. La prueba es un solo gol y dos situaciones de peligro creadas en los tres juegos disputados. Igual sucede con Perú, no están al nivel competitivo de sus rivales. En una tarde feliz pueden lograr un empate, ganar exige otra dimensión. El discurso de los entrenadores es “hay que seguir trabajando”. Y está bien, pero es un problema de intérpretes: no hay jugadores de calidad, una limitante decisiva.
APATÍA BRASILEÑA
La Copa América no es un asunto que desviva a los brasileños. Y menos a los medios. Casi no hay enviados especiales de la prensa brasileña en Estados Unidos. En Globoesporte.com, el sitio deportivo más visitado del país, apenas hay informaciones de la Copa. Previo al trascendental choque entre Brasil y Colombia, la primera noticia del torneo está en el puesto 17. La Eurocopa, en cambio, estaba como estrella, con cuatro grandes notas. Luego, otras mencionando que Corinthians quiere quitarle al Santos al DT Carille, una más sobre los planes del nuevo dueño del Cruzeiro (compró el club a Ronaldo Nazario), más abajo novedades de los Juegos Olímpicos, básquet, fichajes, tenis y al fondo una entrevista a Danilo, lateral derecho del país que está con la selección en Estados Unidos. Ya lo habíamos comprobado en la Copa de 2019 disputada en Brasil. Cobertura mínima. Podría pensarse que es porque la Selección Brasileña no atraviesa un momento estelar, pero en general son así.
CRÍTICAS
En Perú hacen cola para pegarle a su selección. “Sin referentes de nivel, padeciendo atrás y sufriendo arriba, el peor Perú en una Copa América en 29 años”, analiza el rotativo peruano, El Comercio. Pocos enfocan las culpas en el técnico uruguayo Jorge Fossati, aunque lo critican por poner en cancha a Paolo Guerrero (40 años y seis meses) y Gianluca Lapadula (34 y 5 meses). Entre los dos suman 75 años. Imposible hacer daño a cualquier defensa. Es la razón por la cual el técnico que dirige a la celeste, Marcelo Bielsa dejó fuera a Édinson Cavani y llevó casi simbólicamente a Luis Suárez. Ambos tienen 37 largos. Suárez entró en dos partidos, en uno a los ’83, en el otro a los ’89. “Hacía mucho no veía a una selección tan pobre. Pero pobre de verdad. Falta de actitud, o quizá sí, la tienen, pero torpes con el balón. Con miedos, dudas y temores. Chocaban con los argentinos y rebotaban. Les hacían transiciones rápidas y corrían como loquitos. Sin una marca eficaz. Con un caprichoso Paolo Guerrero, que le hace daño al país con su terquedad de seguir jugando. Ya cumpliste tu ciclo…”, Textual del editorial del deportivo Todo Sport, de Lima, a cargo de su director Fernando Jiménez.
NO APRENDEN
En Chile no paran las críticas al árbitro colombiano Wilmar Roldán, en quien personalizan su eliminación. Pero una insólita estadística derriba la hipótesis: a la Roja la eliminaron con un solo gol, que alcanzó porque a su vez no convirtió ninguno. No tuvo penales ni goles dudosos en contra. Simplemente, no tuvo poder ofensivo. Pero la afición se había entusiasmado por la contratación de Ricardo Gareca y, fundamentalmente, por el 3 a 0 propinado a Paraguay unos días antes de la Copa. Eso elevó las expectativas. La federación chilena envió una nota durísima, diríamos extrema, a la Conmebol, solicitando “se sancione al árbitro don Wilmar Roldán con la suspensión indefinida y definitiva, y/o en su defecto, con la máxima sanción aplicable ante conductas tan nefastas como las señaladas, en razón de los errores garrafales que cometió en el partido disputado entre las Selecciones de Chile y Canadá”. Las inéditas conquistas de la Copa América en 2015 y 2016 elevaron el nivel de autoestima de los chilenos, pero aumentaron el grado de exigencia y eso genera crisis. Ahora, el país pide triunfos y la selección (mucho menos los clubes), no están en condiciones de corresponder. Se le fue extinguiendo la Generación Dorada y no han salido nuevos valores. Ricardo Gareca es un excelente entrenador, pero esto es fútbol, no futbolín, se juega con humanos, no con muñequitos.
ACCESIBLE
Después de jugada la primera fase quedó claro que el grupo más agradable, como se preveía, era el B, con México, Jamaica, Ecuador y Venezuela, con dos de la Concacaf, que sigue estando abajo de Sudamérica en poderío. La muestra más palpable es que Venezuela, pese a todos sus progresos, ganara la zona, por primera vez en la historia. Y con puntaje ideal. Jamaica es aún muy rudimentario en su juego y México tiene un drama con el gol.
¿EUROCOPA O COPA AMÉRICA…?
Para la cadena televisiva americana ESPN no hubo dudas desde el comienzo: eligió y compró el torneo del viejo continente y envió todo un contingente, liderado por sus dos estrellas, Mariano Closs y Diego Latorre. La facilidad logística por la cercanía entre las subsedes que ofrece Alemania y, por el contrario, las perspectivas casi inhumanas que presentaba la Copa América en Estados Unidos decidió por la Euro.