Mientras en Bakú, capital de Azerbaiyán se reúne la COP29, la conferencia anual sobre el clima, desde los más remotos lugares del mundo se multiplican huracanes, mares hirvientes, cultivos devastados por la sequía y otros daños al medio ambiente, con incuantificables consecuencias para las poblaciones.

 
Durante dos semanas representantes de 198 países se reúnen en Bakú en la cita anual de las Naciones Unidas (ONU), sobre el Cambio Climático, en un contexto donde el fenómeno alcanza extrema gravedad sin que se contemplen respuestas necesarias y oportunas. En su discurso inicial el Secretario General Antonio Guterres alentó: “Estamos colgando en una cuerda floja planetaria, o los líderes cierran la brecha de emisiones o nos tiramos de cabeza al desastre climático”; y advirtió que “unas emisiones de récord significan temperaturas marítimas de récord que sobrecargan huracanes monstruosos; un calor récord convierte a los bosques en polvorines y a las ciudades en saunas: unas lluvias de récord dan lugar al diluvio universal de la Biblia”. Guterres pidió la comprensión y la ayuda de los países porque “hemos abierto las puertas del infierno”.

 
Los efectos de la furia climática son globales, pero en algunos países por sus alcances, se han convertido en temas políticos, además de noticiosos.

España. La llamada DANA ha dejado cicatrices de barro, destrucción de bienes y centenares de muertes principalmente en Valencia, pero también en Barcelona, Málaga y otras regiones.

Chile-Bolivia-Brasil. Estos países han conocido grandes incendios de bosques con necesaria ayuda internacional.

Cuba. La tradicional época de ciclones y huracanes se vió agravada este año con torrenciales lluvias e innumerables daños materiales.

Colombia. El gobierno declaró el “Estado de Emergencia” ante graves inundaciones en varias regiones y la activación del volcán San José Mulatos, en Antioquia.

Costa Rica. El país centroamericano también ha reportado daños en las últimas semanas.

Venezuela. Después de la tragedia de Cumanacoa en julio de este año, las lluvias han sido sostenidas en la mayor parte del país.

Los países más propensos y vulnerables al cambio climático, son: Chad, Somalia, Siria, República Democrática del Congo, Afganistán, República Centroafricana, Nigeria, Etiopía, Bangladesh.